Podemos estar o no de acuerdo con Alfredo Bryce Echenique, Enrique Vila-Matas o Mario Vargas Llosa, que consideran a Julio Ramón Ribeyro uno de los mejores sino el mejor cuentista del Perú; pero lo indudable es que se encuentra entre los narradores más relevantes de su país y de América Latina.
Por esa razón, que Alfaguara haya publicado en diciembre pasado un libro que, según la editorial, contiene cuentos inéditos hasta ahora, es todo un suceso literario al que los lectores en lengua castellana deben prestarle mucha atención.
Se trata de Invitación al viaje y otros cuentos inéditos, que reúne relatos hallados en el archivo personal del escritor en la residencia de su viuda en París, ciudad donde los escribió durante la década de 1970.

Ribeyro, como se sabe, fijó su residencia en la capital de Francia hacia 1960, donde trabajó como periodista en la agencia France-Presse, como agregado cultural de Perú en el país galo y ministro consejero y embajador de su país ante la Unesco; cargos que desempeñó hasta la década de los 90.
Allí escribió cuentos como los integrados en Las botellas y los hombres (1964), Tres historias sublevantes (1964), Los cautivos (1972), Silvio en El Rosedal (1977) y Solo para fumadores (1987), y novelas como Crónica de San Gabriel (1960), Los geniecillos dominicales (1965) y Cambio de guardia (1976).
Los cuentos hasta ahora inéditos de Ribeyro
A estos clásicos de la literatura viene a sumarse ahora la novedad de Invitación al viaje y otros cuentos inéditos, hallados en su residencia parisina; relatos escritos a máquina con numerosas anotaciones y —en algunos casos— entre varias versiones correlativas, que configuran más bien ejercicios creativos, episodios, personajes, rutas literarias que evaluó, pero no tomó.
Los textos que conforman el nuevo libro vienen de una cuidadosa revisión que tomó como material central la versión más actualizada de cada cuento y la adición de las anotaciones hechas a mano por Ribeyro, con una “mínima y elemental intervención” de los editores, respetando la voluntad del autor y desarrollar versiones finales de aquellos borradores encontrados fortuitamente.